Pudin de Calabaza, Almendras y Nueces

Pudin de Calabaza, Almendras y Nueces, detalle de presentación.

Pudin de Calabaza y Almendras.

Pudin de Calabaza, Almendras y Nueces, detalle 1.

Pudin de Calabaza, Almendras y Nueces, detalle 2.

Pudin de Calabaza, Almendras y Nueces, detalle 3.

Pudin de Calabaza, Almendras y Nueces, detalle 4.

Pudin de Calabaza, Almendras y Nueces, servido con el historico anis patentado en 1919 por NICOMEDES GARCÍA GÓMEZ, Anis la Castellana.
Mas que un postre... una verdadero deleite para tu paladar y muy sano, por sus formidables propiedades nutricionales combinadas.
Mar Alba te ofrece esta exquisita especialidad, de sabor muy suave y consistente, donde identificaras todos sus ingredientes en absoluta armonia. Todo ello perfeccionado por la exclusiva receta de la familia de Alba conservada de generación en generación y siempre recreada al maximo detalle.
Nueces, Almendras y Calabaza..
Frutos secos, Nueces y Almendras;
La gastronomía mediterránea emplea profusamente en sus platos los frutos secos, alimentos ricos en proteínas, fibra, minerales, vitaminas y elevado aporte de grasas insaturadas, lo que les convierte en alimentos cardioproctetores. Numerosos estudios científicos avalan sus efectos beneficiosos en la salud. Los frutos secos se han incorporado a la dieta alimenticia de cualquier persona que realiza esfuerzos intelectuales o físicos que requieren un alto rendimiento y una actividad intensa. La mitad de su contenido son grasas saludables que ayudan a reducir el nivel de colesterol malo y a incrementar el colesterol bueno. Se trata de grasas saludables porque son insaturadas (mono y poliinsaturadas), ácidos grasos oleicos y linoleicos, asi como ácidos grasos omega 3. Estas grasas intervienen en el control de los niveles de triglicéridos y colesterol del organismo, lo que les convierte en alimentos cardioprotectores. Se estima que el consumo regular de un puñado de frutos secos reduce el riesgo cardiovascular. Por otro lado, contienen antioxidantes (entre ellos, las vitaminas E y C) que son imprescindibles para combatir la acción de los radicales libres, sustancias responsables de algunas enfermedades degenerativas y del envejecimiento. La presencia de este tipo de sustancias, que combaten la acción de los radicales libres, confiere a los frutos secos un efecto cardiosaludable adicional debido, fundamentalmente, a la capacidad de los tocoferoles de proteger a las lipoproteínas de baja densidad (LDL) frente a la acción de los radicales libres. Los frutos secos son alimentos tradicionales de la dieta mediterránea caracterizados por un elevado contenido energético, elevado aporte de fibra, bajo contenido de grasa saturada y un elevado aporte de grasa insaturada, fundamentalmente poliinsaturada en nueces, y monoinsaturada en almendras. Los frutos secos son también fuente de proteína vegetal, antioxidantes, vitaminas y numerosas sustancias bioactivas como los flavonoides. Además, su contenido mineral es superior al de otros alimentos ya que aportan al organismo magnesio, fósforo, potasio, calcio, hierro y oligoelementos, como el zinc y el selenio.
Calabaza;
La que más se consume en España es la calabaza butternut (Cucurbita moschata) o la clásica calabaza (Cucurbita maxima). Estamos hablando de un alimento muy interesante por sus propiedades nutricionales, además la calabaza nos ofrece un sinfín de posibilidades de crear platos. Este producto nos alegra el otoño, la calabaza, un ejemplo mas de cuán rica puede ser la cocina de esta estación, tanto para nuestro organismo como para nuestro paladar y salud en especial... Aunque según las distintas variedades de calabaza los valores nutricionales varían algo (también varían según la tierra de cultivo, entre otras cosas, aunque sean de la misma variedad), vamos a hablar de los valores nutritivos medios de este alimento, como es habitual, son los valores por 100 gramos del producto en crudo. La calabaza tiene un elevadísimo contenido en agua, alrededor del 92%, por lo que es una hortaliza muy baja en calorías, aporta alrededor del 25-30 kcal. Su aporte en proteínas también es reducido, alrededor de 1 gramo, es más rico en carbohidratos, y cuanto más dulce sea la calabaza más poseerá. Por ejemplo, la butternut es una de las variedades de calabaza con la pulpa más fina y dulce, puede contener entre 4 y 8 gramos de hidratos de carbono por cada 100 gramos, no es mucho. Además, es un alimento rico en fibra. Hasta aquí ya podemos resumir que es un alimento adecuado para las dietas de control de peso. Pero hay mucho más, la calabaza contiene nutrientes muy beneficiosos para la salud de todos, se considera un excelente alimento por sus propiedades antioxidantes, compuestos que retrasan la oxidación de las células que provoca la acción de los radicales libres. Es rica en betacarotenos o provitamina A (los que proporcionan la coloración anaranjada), un tipo de flavonoide que se considera anticancerígeno. La calabaza también es rica en vitamina C, aunque queda muy lejos de las naranjas, y contiene vitaminas del grupo B, E y ácido fólico. En cuanto a minerales, destaca el calcio, el magnesio, el manganeso y el potasio. Por su composición nutricional, la calabaza recibe el trato de alimento adecuado para todo tipo de dietas, mejora la salud del corazón y de la vista, previene el cáncer, es antiinflamatoria, diurética, previene el estreñimiento, y favorece la dieta de las personas diabéticas puesto que sus carbohidratos son de absorción lenta. Y ahí no queda todo, ya sabéis que la calabaza guarda otro tesoro nutricional en su interior, sus semillas o las pipas de calabaza. Si ya tenéis preparado vuestro ejemplar en la cocina, recordad el consejo para cortar y pelar la calabaza, y disfrutad a menudo de este alimento.